viernes, febrero 24, 2006

Cementerio marino

























("Gondolero en un canal de Venecia", Bouvard)

Cementerio marino
San Michelle.

El gondolero de la isla de los muertos,
ofrece boletos de ida para su nave;
en el cortejo, el olor a jazmín de estas aguas,
ojo de mar conectado al abismo
paisaje que hiede-hiere en los canales.
Empujados por la corriente, igual que el último impulso de sangre por las venas
giramos la cabeza en todas direcciones, acechamos como un tríptico
facetas de perros con la mirada.
Olfateamos esta tierra que es ahora una colina
territorio ganado al agua a fuerza de cuerpos.
Uno a uno desaparecemos, espectros deformes
extendidos como bruma en busca de espacio.
Desde esta isla, la vista asusta
y sellamos la imagen como una tumba
hundida en el fango.

sábado, febrero 18, 2006

Mansiones de Guerra









(West Point)

Mansiones de guerra
West Point

Curiosa fauna en la exactitud del disfraz,
impresiona el lustre, el perfecto corte de sus medallas,
impresiona el despliegue, las sobras de su festín.

(disparan desde lo alto desde lo infinito desde ojos animales)
(acechan desde las profundidades de la tierra y los océanos)
(construyen sus ciudades sobre templos ajenos)
(aúllan desde sus mansiones, nuestros campos minados)

lunes, febrero 13, 2006

Oráculo.

Fresco Pompeyano

Oráculo.
Pompeya.


El viento sacude el velo gris sobre la piedra.

En el mismo sentido en que las aguas corrían,
un pájaro muestra el camino a su nido
dejando una huella delineada en el polvo.

Una huella como si el tiempo no fuera más que oleajes
espejismos, pájaros que volaron en círculos nuestras cabezas.


En la puerta del templo los vaticinios
ruinas hermosas, aún putrefactas a los pies de la ciudad.

Limbo








("La habitación del artista en Arlés", V.Van Gogh)

Limbo

La pieza de Van Gogh gira en nuestras cabezas
con las vísceras expuestas en el arte, en los estigmas del paisaje.
Somos sombras, miramos de reojo las pinturas
atravesando los pasillos en puntas de pie, con un leve escalofrío.
Somos una multitud examinadora, niños extasiados ante el recuerdo.
Reconocemos la pincelada, la mano que desde otro lugar nos toca el hombro, asusta.
Desaparecemos en el umbral de estos dos mundos, nuestros cuerpos
grandes tótems, retratos deformes y translúcidos
ventanas abiertas a épocas estampadas en la pared.
Vagamos en el limbo, transmutados
sólo nos han dejado los ojos espectadores de su burla.
Somos cuerpos, imágenes y pesadillas
música incidental en el gesto,
grito de vida que incita a la trascendencia.

Venecia






(Canaleto)


Venecia

Bajo cada canal hay una nueva calle
en la que los reflejos vagan sumergidos.
Existimos al mismo tiempo,
sobre la tierra físicos
siluetas en el agua reflejados.
Vemos pasar las góndolas sobre nuestras cabezas,
barcas aladas sobre cielo lícuo.
Por debajo somos reales,
no carne, no reflejo
sólo venas mar adentro
en los canales, en lo abisal de nuestros cuerpos.